jueves, 7 de enero de 2010

Ir de compras, una felicidad pasajera.

¿Por qué tenemos la necesidad imperiosa de ir de compras?
Parémonos un momento a pensar, ¿Qué me satisface a mi de ir de compras?, en realidad no necesitamos tanta ropa en los armarios, no nos da tiempo a ponérnosla, es más bien la “sensación de felicidad” que nos crea el hecho de ir de compras, pero no nos engañemos, estamos hablando de una felicidad pasajera, algo vanal, no sé realmente si está relacionado con el sexo femenino pero el hecho de probarnos ropa, mirarnos en los espejos con diferentes modelitos y vernos guapas nos descarga “adrenalina” . Luego llegamos a nuestra casa, colgamos toda la ropa en el armario, después de habernos gastado más de lo que deberíamos, nos sentamos a ver la tele y ¿qué tenemos? ¿qué sentimos? NADA. Ese es el sentimiento que te queda después de haberte gastado 100 euros o más en ropa en cuestión de un par de horas, no tenemos nada, porque en realidad no lo necesitamos, no es un coche porque no tenía coche, no es un sobrino, un amigo, un novio, un trabajo, un aprobado… no es nada, es la misma sustancia superficial, artificial y superflua que colgaba antes de nuestras perchas ¿la ropa te divierte? ¿te cuenta chistes? ¿te dice que te quiere? Puedes salir con ella a tomarte un café o te aprueba un examen… NO, no te sirve de nada tener un armario con 4 modelitos casi idénticos de cada cosa, 9 pantalones igualitos, 6 faldas que parecen clones, 8 camisas que en lo único que se diferencian es en el color y sin contar botas, zapatos, sudaderas, camisetas 1000… buff me canso sólo de saberlo. Yo la verdad sinceramente lo único que pienso al gastarme mucho dinero en ropa que no necesito, es que ese dinero no me lo voy a poder gastar en otra cosa, como en ir al cine, salir con mis amigos, ir a cenar, ver un concierto o simplemente hacerle un regalo alguien que te importe porque eso sí que me va a crear un estado de felicidad que no va a ser pasajero. ¡Disfrutad de las rebajas!